Creo que esta es una de las tartas que conozco que más gusta a todos. La verdad que es muy fácil hacerla, y ya se ha convertido en un clásico de la repostería.
Y es que a todos se nos abren los ojos y empezamos a salivar cuando oímos la palabra chocolate. Por eso esta tarta de Tres Chocolates es una auténtica perdición...
Acostumbrada a las horas que dedico a las tartas con fondant, esta la he hecho, como se suele decir, en un verbo.
Me la ha encargado una amiga, Cristina. Me dijo que si podía hacer esta tarta a su hermana Laura por su cumpleaños, tenía muchísimas ganas de ella, así que es un día muy especial para poder comérsela y disfrutarla.
La elaboración de la tarta es muy sencilla, no tiene ninguna complicación. Eso sí hay que dedicarle su tiempo...
Con respecto a la decoración tenía algunas dudas. Me rondaban varias ideas por la cabeza, y como me cuesta tanto elegir a la primera, he tardado lo suyo en decidirme.
Primero he hecho una filigrana de chocolate negro, para que destacara sobre el fondo de la primera capa de chocolate blanco. Y las calas son la guinda del pastel...están hechas con fondant, y dan a la tarta un toque sencillo pero elegante a la vez. Mi intención era que la tarta quedara bonita, sin necesidad de recargarla mucho.
Esa es mi opinión, pero juzgad vosotros mismos...XD
Que buena pinta tiene seguro que está riquísima!! :)
ResponderEliminarPRECIOSA¡¡¡¡¡ Y ADEMÁS TIENE Q ESTAR RIQUÍSIMA¡¡¡
ResponderEliminarmadre mía maría que bonitas las calas. Te ha quedado genial
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